¿QUIÉN ES DIOS? ¿QUIÉN ES USTED? – Episodio 24 : Quién cree ya tiene vida eterna
- 26
- Oct
- 2023
¿Dios estará tan lejos de manera que no le ve?
Tengo algo para decirle: Dios le amó, antes incluso de usted nacer, Él no fue indiferente a usted y a toda la humanidad. Él siempre quiso cuidarle, y envió a sus siervos, envió personas que creyeron en Él, y aceptaron el desafío de obedecerle.
Es decir, Dios usa a esas personas para anunciar a otras la vida, la disciplina, el orden que hay en la vida.
Cuando obedece a Dios, empieza a tener vida y vida verdadera, no la vida mentirosa en la que pasa un tiempo bien y se entristece nuevamente, ¡no! ¡es vida para siempre!
Y Dios no quedó por ahí, Él envió a Su Hijo amado, el Señor Jesús, para venir a este mundo y dar la vida por usted, por mi y por todos, para que no estemos bajo las cargas del mal, para que fuésemos salvos del mal.
Dios compró nuestra pelea, Él pagó el precio para arrancarnos la esclavitud. Pero tal vez usted esté ahí y no cree en nada de esto que le estoy diciendo.
Pero voy a decirle algo sobre lo que está escrito en la Palabra de Dios:
“El Padre ama al Hijo y ha entregado todas las cosas en su mano.” Juan 3:35
Cuando el Señor Jesús vino a este mundo, el Padre no dejó de amarlo. Jesús pagó un alto precio, digamos que Él “disminuyó” Su posición, porque Él vivía en un Cuerpo Celestial y pasó a tener un cuerpo humano, con las mismas tentaciones que nosotros tenemos.
Jesús sufrió todas tentaciones que usted y yo tenemos. Pero eso no quiere decir que cuando Dios envió a Su Hijo al mundo no Lo amaba. Y además, no fue el Padre quién lo mandó, sino que fue el hijo quién Se presentó al Padre para ser ofrenda viva, y el Padre aceptó.
Jesús vino por causa de Su sumisión, de Su humildad, de Su reverencia, de Su respeto hacia Dios Padre, el Propio Dios Padre entregó todas las cosas en las manos de Él. Dios ama a Jesús y entregó todas las cosas en Sus manos.
“El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que no obedece al Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios permanece sobre él.” Juan 3:36
Observe que si no cree en el Señor Jesús, que le dio la oportunidad, que fue el Sacrificio, el Ejemplo perfecto, no verá la vida. Y la creencia no es usted decir “yo creo en Jesús”, no es simplemente eso, sino que creer demanda de usted obediencia, confianza, es decir, considerarlo por encima de si mismo, respetar lo que Él le dice.
Si respeto lo que Dios dice, entonces lo que Él dice está por encima de lo que pienso.
Si respeto lo que Dios dice, obedezco al lo que Él me dice.
Porque es lo mejor, entiendo que Él hace lo mejor. Creo en Él más de lo que creo en mi mismo, en mi manera de ser, en mi forma de sentir. ¡Esto es creer en Jesús!
La Biblia dice que aquel que cree en el Hijo tiene la vida eterna. ¿Usted cree? Entonces, ya tiene vida eterna, ya es feliz.
No tiene que viajar, no tiene que hacer muchas cosas, tener muchas cosas, tener mucho dinero, muchas posesiones, tener el reconocimiento de las personas, no lo necesita, porque ya tiene la vida eterna.
La vida eterna no es una vida limitada a esta vida, que usted vive cincuenta, setenta años, ¡no! La vida eterna es usted tener paz en su interior, es tener a Dios con usted todo el tiempo.
Pero aquel que cree en el Hijo no tendrá la vida. Es decir, la vida para ella es viajar, es casarse. En su cabeza, para ser feliz, para tener vida, es que sus hijos no se casen y vivan toda la vida con ella. Y es una vida pasajera, que no satisface, no realiza, te da un cierto placer, pero no resuelve sus problemas.
Casarse, tener sus hijos, tener dinero, tener posesiones, tener una carrera respetada en este mundo no es tener vida. La vida está en la vida eterna, cuando cree en Jesús, cuando obedece.
Cuando obedece, entiende, acepta. Entiende que Dios sabe lo que es mejor para usted, aunque no lo entienda al principio, pero se sujeta porque tiene la certeza de Quién Él es.
¿Tiene vida eterna? ¿esa creencia que tiene en Dios le sustenta? ¿o dice creer porque Él puede beneficiarle, puede tener dinero, puede tener las cosas de este mundo?
Bueno, ¿cuál es la vida que dice que es vida? ¿es la vida eterna o son las cosas pasajeras que este mundo le ofrece?
¿Por qué tengo vida eterna?
Porque no necesito que las personas cambien para que yo sea feliz.
Porque no necesito que todos los problemas sean resueltos.
Porque creo en Dios, independientemente de los problemas ser resueltos o no.
Porque tengo paz, soy feliz, no dependo de algo para hacerme feliz o darme una alegría momentánea.
Obviamente que existen problemas que quiero que sean resueltos, personas de mi familia que quiero que sean salvas, pero no dependo de eso para ser feliz. Quiero que esas personas tengan lo que yo tengo, pero eso no me entristece, porque el Señor Jesús es mi vida, y Él me da esa vida, esa vida que es entro Él y yo.
¿Usted tiene la vida eterna? ¿o es feliz por poco tiempo? ¿en ciertos momentos? Es esto lo que me gustaría que viese sobre si mismo.
Porque he observado que, a veces, muchas personas dicen que creen en Jesús, están incluso ayudando a los demás, aparentemente a encontrar a Jesús, pero ellas mismas no conocen a Dios. Dependen de que las cosas sean resueltas para ser felices.
Sé que mi familia, las personas que amamos nos hacen daño cuando no tienen la vida eterna. Duele verlas sufriendo, pero no puedo depender del cambio de ellos para que yo viva.
¿Voy a ser influenciado por causa de esas personas? ¿por ellas no querer a Jesús? ¿por no haber tomado aún la decisión? ¡No! ¡No puedo! No puedo esperar por nada ni por nadie.
Mi vida está pautada en Jesús. Y es esa alegría, esa creencia en el Señor Jesús que me mantiene bien, incluso cuando existen problemas.
Quiero que aprenda a lidiar con la verdad para que no sea engañado. ¡Es todo lo que quiero!
Quiero que esté bien instruido. Que Dios ilumine su mente para que así, vea su condición, para que no sea engañado.
Si usted realmente tiene vida eterna, entonces no hay duda y su vida retrata eso. No con las posesiones, con los problemas resueltos, sino que su vida retrata eso dentro de si. Usted está resuelto con Dios. Siempre está resolviendo quién ha sido.
Es tentado a quedarse triste, a ceder por las emociones, pero no es vencido. Las sobrepasa y se mantiene bien.
Bueno, ¡espero que haya entendido!