Nacer de Dios

Viviane Freitas

  • 10
  • May
  • 2014

Nacer de Dios

  • 10
  • May
  • 2014

Recientemente atendí a una señora que me preguntó qué es nacer de Dios. Y le conté una historia para darla un ejemplo de lo que esto significa en la práctica.



Cuando me casé, fui a vivir a otro país. Todo era novedad para mi, y la primera semana fuimos enviados a una ciudad donde la iglesia acababa de sufrir una tragedia.

Volviendo de una reunión, un camión paso delante del coche que el pastor conducía y provocó un grave accidente. El pastor murió y en el momento la esposa fue llevada gravemente herida la hospital.
Todos estaban muy tristes en la iglesia, y nosotros llegamos allí, en medio de todo eso… Yo no tenía ni idea, pero aquella experiencia me iba a enseñar mucho sobre el nuevo nacimiento.

Después de un tiempo en tratamiento intensivo, varias cirugías para reconstruir el rostro, ella finalmente despertó. Todos pensaban en cómo darle la noticia de la muerte de su esposo, y fue cuando ella sorprendió a todos con una pregunta: “¿Qué día es hoy?” a lo que le respondieron “domingo”, y ella enseguida dijo: “Necesito ir a la iglesia…”.
Unos minutos después, el médico constató que ella había perdido totalmente la memoria, ni siquiera se acordaba de su marido, pero todo el tiempo, mientras conversaba con las personas que la visitaban, ella decía que Dios estaba con ella.
Aquella esposa de pastor había perdido a la única persona que había estado a su lado muchos años, su marido, había perdido todos sus recuerdos, incluso las de su propio marido, pero aún así, ella no se olvidó de que era mujer de Dios; no se olvidó de su encuentro con Dios, y que, desde aquel día hasta ahí, Él estaba con ella. Aquello se quedó grabado en mi, aquella mujer era un verdadero ejemplo de lo que es ser hijo de Dios.

Quien nace de Dios se hace uno con Él, así como Jesús dijo en Juan 10:30. No se puede olvidar de Dios cuando se sale de la Iglesia e ir “disfrutar” un poco del mundo, no se puede cambiar de idea cuando vienen los momentos difíciles, no se puede dejar de creer o decepcionarte con tu fe.
Nacer de Dios nos da otra visión de esta vida, otra perspectiva, y ocurra lo que ocurra, nada puede impedir a la persona continuar con Dios, simplemente porque ella ya no es un ser común, sino que se volvió un ser espiritual – un ciudadano de otro mundo.
Por eso, vencer el mundo es una consecuencia inevitable para los que son Hijos de Dios.

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4 comentários

  1. Es cierto es tan importante Nacer de Dios , cuando realmente se Nace de Dios es imposible olvidarse de él , entre medio de uno y Dios jamas puede a ver alguien . Muy buena palabra y su explicación . Dios la bendiga Señora Viviane Freitas

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  2. la verdad que muy fuerte solo Dios sin palabras .

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  3. Muy fuerte, la verdad nacer de Dios es estar unida con Él, nada te separa, ni las luchas por mas fuertes que sean, cuando s eesta a los pies de ÉL, uno ultrapasa todo.

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  4. Muy fuerte!!! Es incrible que se hubiese olvidado de todo menos de Dios y su deseo de no faltar los domingos pues pudiera quedar descansando pero ella queria estar ayi, Fue el propio Dios que no permitio que olvidase de el.

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