La vida de Jacob – 17º Día

La vida de Jacob – 17º Día

Hola todos. Estamos hablando sobre la vida de Jacob.

Me alegro mucho por ti, que nos acompañas desde el principio, porque quien comienza y va hasta el fin es porque tiene un objetivo.

“Entonces Jacob le preguntó, y dijo: Declárame ahora tu nombre. Y el varón respondió: ¿Por qué me preguntas por mi nombre? Y lo bendijo allí. Y llamó Jacob el nombre de aquel lugar, Peniel; porque dijo: Vi a Dios cara a cara, y fue librada mi alma. Y cuando había pasado Peniel, le salió el sol; y cojeaba de su cadera.” (Génesis 32:29-31)

Cuando Dios bendice, hay una certeza tan grande, pero tan grande, que te capacita a volverte una persona osada.

Cuando “vemos” a Dios en nuestra vida, hay una convicción interior, e irrevocable.

Jacob asumió su propio pecado, y Dios cambió su vida. Aquel día no fue apenas la palabra que lo bendijo, sino su actitud le permitió verlo.

“Vi a Dios cara a cara y mi alma fue librada”
Él se consideró literalmente perdido durante todo su pasado. Incluso teniendo éxito, siendo riquísimo, con hijos, dos mujeres… Y, ahora, ¡estaba completo!

Muchas personas buscan completarse con algo de afuera, pero en su interior carecen de paz. ¡La paz y la bendición que Dios le dio a Jacob, fue completa!

Si amiga, no apenas lo entiendo porque leo, sino porque también yo vi a Dios cara a cara en mi vida. Me volví una persona audaz. Ya no necesité tener una referencia para reflejarme. Tenía la dirección del propio Dios en mi interior, que me mostraba donde debería estar y qué hacer.

Y; ¿ qué bendición de Dios es esta? Quizá te preguntes.

¡Es una definición! De esta manera no te quedas insegura, perdida, sin saber adónde ir. No te quedas con dudas. Cuando hay dirección, existe paz y certeza.

“le nació el sol, cuando él atravesaba Peniel…”

El sol se le apareció, así como surge la luz para quien entrega y sacrifica. La luz y la dirección no se manifiesta con palabras, ¡sino que se manifiesta en una entrega genuina y sincera!

Es muy importante analizar los pequeños detalles, porque son estos los que hacen la diferencia, tanto en nuestra fe como en nuestra vida.
¡Hasta mañana!

Dejar un mensaje

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*