Quien oye a Dios, se sujeta y Lo anuncia

Muchas personas tienen informaciones acerca de Dios, pero no Lo conocen. Apenas son simpatizantes, porque Él atendió alguna necesidad familiar, en la salud o financiera…

Pero ser simpatizante no hace a nadie dar la vida. Usted puede incluso anunciar a otras personas sobre Dios, pero conocerlo, no lo conoce. Y si no lo conoce, no consigue amar.

Por eso está escrito:

“…que hemos oído y conocido, y que nuestros padres nos han contado.” Sl 78:3

Una cosa es oír de nuestros padres los hechos de Dios. Otra cosa es tener una experiencia personal con Dios, poder oírlo y saber de Él lo que necesito saber. ¡Es una experiencia inexplicable! Es algo que no permite que me quede en manos de lo que los demás hablan, sino saber quien es Dios de verdad.

¡Quien oye y sabe sobre Dios no puede callarse! No puede quedarse indiferente a Dios y a las personas de su alrededor, sino que tiene que hablar de lo que Dios hace, de lo que Dios es.

Muchas personas dicen conocer a Dios, pero no se lo han hecho saber a otros, y ¿por qué no? Porque no conocen verdaderamente a Dios.

Usted puede saber de los milagros que Dios es capaz de hacer. Puede conocer a Dios por las experiencias que otros hablan, pero usted jamás será fiel a Dios si no Lo conoce. Porque el día en que usted conozca a Dios, va a entender la necesidad diaria de estar siempre aprendiendo con Él. Y todo esto es porque usted quiere agradarle.

Es muy importante que usted viva la orden de Dios, la disciplina de Dios, que muchas veces va a contrariar su voluntad, para que tenga experiencias de lo que usted oyó de Dios, y conocerlo en la práctica.

Siempre debe contar a sus familiares lo que Dios le ha enseñado, esto no es teoría, sino vivencias de aquello que usted oye de Dios.

Por eso dice así: “No las encubriremos a sus hijos, contando a la generación venidera las alabanzas del Señor, y su fortaleza, y las maravillas que hizo.” Sl 78:4

No encubra, porque en lo que usted encubre, no anuncia la veracidad de la Palabra de Dios.

¿Usted sabía que cuánto más habla de lo que Dios hizo, más se estimula a si misma para ser grata a Dios?