Obrera: Obrera sin disposición

Viviane Freitas

  • 2
  • Oct
  • 2014

Obrera : Obrera sin disposición

  • 2
  • Oct
  • 2014

Conversando con una amiga, ella me hablaba sobre una situación que sucede muy a menudo entre aquellos que dicen ser siervos de Dios, y que disimuladamente ha invadido la mente de muchos.


Y dígase de paso, nadie está inmune a que esta situación surja en su vida, incluyéndome yo, que siempre os escribo, pues si no vigilamos, y me dejo llevar por mi propia voluntad, ciertamente lo mismo me sucederá también. Pues acuérdese que no es por el hecho de vestir un uniforme, o que tener una posición dentro de la Obra de Dios, que estamos descartadas de que algo semejante nos acontezca.

Bien, lo que vengo a alertar en el artículo de hoy es algo muy serio. ¡Se trata de la falta de disposición! Lo que se ha verificado es que en muchas no existe esa disposición para servir, en toda y cualquier circunstancia. Y ¿por qué? Porque al haber un imprevisto, ¡no dejan a un lado la ansiedad! Voy a explicarlo mejor.

Existen algunas obreras que tienen tiempo para todo, tienen fuerza para trabajar, para estudiar, para luchar por su vida personal, y cuando surge lo inusitado en sus vidas, tienen coraje para permanecer en esa lucha por sí mismas, lo que no está errado, pero en lo referente a la Obra de Dios, no tienen la misma disposición, no se disponen a vestir la camisa para guerrear por el pueblo.

Pero ¿cuál es tu llamada dentro de la Obra de Dios, si todo para ti, está en primer lugar? La familia, el marido, el novio, el trabajo, los estudios, la vida financiera, están por delante de su llamado.

Cuántas no son las que dan disculpas porque están cansadas, o porque tienen un pequeño dolor de cabeza, es decir, la más mínima contrariedad ya es motivo suficiente para vestir el uniforme, o sea, bajan la guardia. Mis compañeras, sólo quiero recordaros que estamos en una batalla y que en ella no hay tiempo ni para limpiar las armas. Siempre debemos tener viva esa disposición dentro de nosotras, y pase lo que pase, o surja lo que surja, debemos siempre decir: ¡Heme aquí! Claro que todo tiene un equilibrio, no quiere decir que ahora va a despreciar su vida personal, pero, vigile para no ser aquella obrera que nunca está lista para nada, sólo para hacer lo que le agrada.

Me gustaría que pensara en este asunto y se preguntara a sí misma: ¿Soy esa obrera con disposición? ¿O aún tengo reservas en mi entrega?

Si quiere ser una obrera que marque la diferencia en su ministerio, entonces esté siempre dispuesta.

Me gustaría leer su comentario.

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48 comentários

  1. Es verdad si no vigilamos podemos hasta ser egoista en nuestro servicio hacia Dios por eso tenemos que vigilar y dar, si damos para Dios no hay forma de que Dios no nos retribuya de lo que nosotras necesitamos.

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  2. yo pienso que si uno se queda sin dispocision para la obra de DIOS es por que que nuestra comunión con el a sido descuidada no estamos hablando de cualquier ocupación hablamos de algo tan sagrado como la obra de DIOS los problemas la aflicciones llegan y DIOS es el que nos da fuerza y hasta pelea por nosotros pero si estamos lejos de el no puede ayudarnos y así perdemos nuestra dispocicion

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  3. Buenas Tardes. Es asi , siempre tengo que estar dispuesta en la obra de Dios, A veces no conseguia disciplinarme de forma que mi ministerio quede en ultimo lugar, pero siempre pido la direccion al Espiritu Santo para ser una sierva dispuesta y siempre decir heme aqui en lo que Dios quiera de mi. Dios la bendiga!

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  4. En ocasiones,pensamos que todo esta bien, pero no es así……hay momentos que nos descuidamos y tomamos la actitud de conformismo ante la situación o dejamos que lo que estamos haciendo nos absorba y nos hace olvidarnos para que fuimos llamados y por quien …… en nuestro corazón debe estas siempre la disposición para toda ocasión y todo momento.

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  5. Es algo muy cierto Sra. debemos estar muy atentas y vigilar mucho día a día para no acomodarnos, ser equilibradas es la clave, pero nunca olvidar para que fuimos llamadas, ya que el diablo no descansa y nosotras guerreras de Dios no podemos parar. Dios la bendiga y muchas gracias por esta advertencia.

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  6. Es cierto, hay que tener siempre disposición para esta batalla, no dejarnos vencer por la situaciones de la vida cotidiana, hacer siempre un tiempo para prepararnos para la batalla (orando, ayunando) y también para ir a la batalla (reuniones, evangelizar); claro esta siempre con un equilibrio.

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