LA VERDAD – Episodio 79: La verdad no da excusas

LA VERDAD – Episodio 79 : La verdad no da excusas

El reino de los cielos es semejante a un rey que hizo bodas a su hijo, Y envió a sus siervos a llamar a los que habían sido invitados a las bodas, pero no quisieron venir.” (Mateo 22:2,3). 

Imagine ser invitado a una fiesta. Es Dios celebrando la resurrección del Señor Jesús. Pero los siervos no quisieron venir para las bodas.

Volvió a enviar otros siervos, diciendo: Decid a los convidados: He aquí, mi comida he preparado, mis toros y animales engordados han sido muertos, y todo está preparado; venid a las bodas.”  (Mateo 22:4). 

Es decir, Dios está diciendo lo siguiente: “tenemos aquí el alimento para que usted viva”. Pero cada uno fue a un lado. Y esto es muy común hoy en día. Las personas están tan ocupadas con sus vidas y no quieren oír la Palabra de Dios.

y los demás, echando mano a los siervos, los maltrataron y los mataron. Entonces el rey se enfureció, y enviando sus ejércitos, destruyó a aquellos asesinos e incendió su ciudad.” (Mateo 22:6,7). 

Dios da oportunidad para que el pueblo tenga una vida de paz. Pero el pueblo da valor a cosas pasajeras. Y Dios se molesta, porque dio tantas oportunidades.

Entonces dijo a sus siervos: Las bodas a la verdad están preparadas; pero los que fueron convidados no eran dignos.” (Mateo 22:8). 

Tal vez, usted va a la iglesia, pero no recibe el alimento, las oportunidades. Hoy en día, tenemos varios medios para buscar el Reino de los Cielos. Pero la atención de las personas está dividida entre internet, familia, trabajo. ¿Se ha dado cuenta que con el pasar de los años las personas viven corriendo y casi no tienen tiempo? Pero dedicamos tiempo para aquello que es importante.

Dios ve cómo usted hace las cosas de Él. En medio del dolor las personas se acercan a Él. Pero ¿da valor a las cosas que Él le dio y no a Quién Él es? Usted, que va a la iglesia a empujones, no se ha vestido apropiadamente. Estas personas cumplen un papel religioso. Y un día habrá un Juicio. Y muchos son llamados, pero pocos son escogidos.

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