LA CODICIA – Episodio 22: La codicia y la herejía

LA CODICIA – Episodio 22 : La codicia y la herejía

Ya debe haber oído hablar sobre: “una vez salvo, salvo para siempre”. Y es muy común oírlo de personas que se dicen ser bautizadas con el Espíritu Santo, que no pasa nada por pecar, porque Jesús ya llevó sobre Si nuestros pecados, independientemente si es bautizada o no, si ella erra Dios la perdona, que estamos en el tiempo de la gracia…

Y es así como muchas personas se han engañado, están usando una herejía. ¿Sabe lo que es herejía? Es una interpretación o doctrina falsa. Es una teoría, una idea, una práctica que niega o es contraria al orden establecido por Dios. Es decir, hay muchas personas que no sólo lo dicen, sino que viven así, de forma hereje, contraria a la orden de Dios.

Dios constituyó, a través del Señor Jesús, después de que Él ascendió a los Cielos, Su iglesia, pero hoy en día hay muchos que usan escusas para decir que pueden buscar a Dios desde su casa, de cualquier lugar. ¡Es verdad! Todos deben continuar buscando a Dios, pero la Biblia nos enseña a separar tiempo para ir a la Casa de Dios.

Porque en aquel momento en que va a la iglesia, oye no lo que quiere oír, sino lo que necesita oír. Muchas personas se están engañando, poniendo en práctica esas ideas diabólicas que han apartado a muchas personas de la fe.

Me gustaría que pensase sobre si mismo. Vamos a evaluar, a observar nuestras palabras, si hemos cometido errores con lo que hablamos, con lo que pensamos, con lo que creemos.  Y la única forma en que podemos entender si nuestro camino está errado es cuando verificamos, observamos, evaluamos, eso se hace con una fe inteligente.

La fe inteligente absorbe lo que la Palabra de Dios dice y se demuestra con lo que ha sido de hecho verdad en su vida.

“Viviane, ¿qué tiene que ver la herejía con la codicia?”

¡Tiene todo que ver! Porque la carne codicia contra el espíritu, es decir, no acepta, rechaza la verdad, el temor a Dios. La carne siempre da libertad para sus deseos, inclinaciones.

Y está escrito:

“Porque las obras de la carne son manifiestas, las cuales son: adulterio, fornicación, impureza, lascivia, idolatría, hechicería, enemistades, contiendas, celos, iras, peleas, disensiones, herejías…” Gálatas 5:19,20

La herejía es la interpretación falsa, doctrina falsa, la teoría, la idea, la práctica que niega las órdenes establecidas por Dios, la disciplina, Su mandamiento.

Porque quieren hacer las cosas a su manera, por eso muchos se inventan una teoría, una idea para que las personas acepten de una forma “más leve, sin que cueste tanto, sin que cueste nada”.

Como dice la Palabra de Dios:

Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, …” 2 Pedro 2:1

¿Lo ha pensado? ¿aceptar una idea por causa de un deseo propio y por eso negar a Dios? ¿no sería eso codicia? ¿querer una cosa que no le conviene?

 “…trayendo sobre sí una destrucción repentina. Y muchos seguirán sus perdiciones, por los cuales el camino de la verdad será blasfemado; …” 2 Pedro 2:1,2

Blasfemar con Dios es corromper, avergonzar el camino de la Verdad, es querer hacer las cosas a su manera. Y muchas personas van a seguir esas ideas, esos pensamientos, ¿por qué?

y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas, sobre los cuales la condenación ya de largo tiempo no se tarda, y su perdición no se duerme. Porque si Dios no perdonó a los ángeles que habían pecado, sino que, habiéndolos despeñado en el infierno con cadenas de oscuridad, los entregó para ser reservados al juicio; …” 2 Pedro 2:3,4

Dios va a dar sentencia a esas personas que están usando argumentos por causa de su avaricia, de su apego al dinero, a la riqueza. Personas que miran por su condición financiera, es decir “voy a ver la manera de ganar más dinero, hablando de una forma que agrada a las personas, para que me den más dinero…” pero de forma falsa, engañando a las personas.

Dios ve todo y Él da tiempo. Y el propio tiempo estará en contra de aquella persona. La verdad que ha oído se volverá contra ella. La oportunidad que tuvo se volverá contra ella.

Esas personas que están engañando, trayendo ideas baratas, con esas practicas diabólicas, atraen un tipo  de público, por la forma en que quieren llevar el Evangelio.

El Evangelio tiene su precio, su sacrificio de ser verdadero, de andar en obediencia a Dios, es decir, de sujetarse a Dios, no hacer las cosas a su manera, no hacer su voluntad, su idea, no usar sus argumentos, sino hacer lo que Dios dice.

Por eso es tan importante que lea la Biblia. Cuando lee la Biblia empieza a entender los pensamientos de Dios.

Si se interesa en meditar en la Palabra de Dios, empieza a observarse a si mismo y a corregirse las cosas erradas. Pero si no lee la Biblia, ¿cómo va a corregir sus hechos? ¿cómo va a ser detallista y observar lo que ha hecho errado?

Bueno, ¡la conciencia es de cada uno! Ahora tenemos que poner en práctica. La Palabra de Dios es para todos nosotros, no es para algunos, ¡es para todos! Reciba esta Palabra y haga uso de una fe inteligente, pensando, pautada en lo que dice la Palabra de Dios.

Siga las orientaciones de Dios, no sus pensamientos, no sus impulsos, no sus sentimientos, porque son traicioneros. Ellos codician contra el espíritu.

¿Se imagina? ¡Por eso tenemos que estar atentos, vigilando!

Dejar un mensaje

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*