Jóvenes : ¿Injustamente?

Si había algo que me molestaba en la escuela era cuando todo el salón de clase estaba “desordenado”: al hablar alto, reír, conversar, etc.

la profesora en el exacto momento en que se daba vuelta me miraba y me reprendía solamente a mí, solo por estar cerca de quien realmente estaba haciendo todo el lío.

¿Injusticia, mal entendido?… Lo peor era cuando me iba a justificar diciendo que no era yo quien estaba riendo fuerte y conversando… ¡y la profesora no me creía! Estas situaciones se repetían en diferentes episodios y proporciones.

Esto genera un sentimiento de injusticia y, peor, pensamientos de que estamos siendo perseguidos. Estos pensamientos son muy peligrosos, pues marcan nuestro carácter y, sin querer, terminamos haciendo que se aparten las personas que están a nuestro alrededor, como un pero herido que no confía en nadie y cualquiera que se aproxima es atacado.

Pero aprendí una cosa con el apóstol Pablo que me hizo reflexionar en todas las situaciones que me dejaron así:

“Examinadlo todo; retened lo bueno.
Absteneos de toda especie de mal.
Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo”.
(1 Tesalonicenses 5:21-23)

Me llamó la atención 4 órdenes:

– Examinadlo todo – O sea, no podemos ver solo desde nuestro punto de vista, necesitamos extender nuestra visión. Es un hecho que cuando el ser humano nace es 100% egocéntrico, solo ve su propio lado, pero la madurez también quiere decir que no ve solo su perspectiva, ve la situación en un todo. Examinar todo es ver qué es lo que nosotros estamos haciendo, y si la actitud, pensamiento, sentimientos que tenemos agrada a Dios o no.


– Retened lo bueno – Esto significa ver lo que puedes aprender con la situación.

– Absteneos de toda especie de mal – Es importante reparar que no dice absteneos del mal, sino también de todo lo que pueda parecer o sugerir el mal. Hoy veo que, a pesar de no ser yo la que hacía el desorden en la clase, contribuía a tal, ¿qué pensaría yo si estuviese en el lugar de la profesora?


- Sea guardado irreprensibles – Si hay reprensión (aunque pueda parecer injusta) es porque de alguna forma di motivos para esta.

¡Piensa en esto!