¡Cuidado con el camaleón!

Elaine Rocha

  • 15
  • Sep
  • 2015

¡Cuidado con el camaleón!

  • 15
  • Sep
  • 2015

Estaba pensando en la facilidad que tenemos en adaptarnos al ambiente en que vivimos y a las personas con quienes convivimos. Es muy común ver personas cometiendo los mismos errores de otras, cercanas, y que tengan las mismas actitudes. Todo depende del ambiente en que usted vive.

Si quiere agradar a Dios, tiene que prestar atención si no está cambiando de comportamiento conforme el ambiente y las personas.

Un ejemplo de eso, es en casa dar mal testimonio para los familiares mientras en la iglesia muestra una santidad, es buenita, obediente con las otras personas y autoridades; en la escuela, igual a sus compañeros de clase, y en el trabajo tener las mismas actitudes y comportamiento errado de sus compañeros,etc. O sea, ¡no da testimonio de la fe que dice tener!

No podemos ser como el camaleón que queda con el color parecido con el ambiente en el que está.

No debemos camuflar la verdadera identidad. Si tiene la identidad de la fe, asúmala donde esté, sea diferente, destáquese de las otras, no haga igual a nadie para caer bien, pues una de las virtudes que es muy admirada en una persona, es cuando ella es una en todos los lugares, independiente de quién sea.

La verdad siempre prevalecerá y por más que intente esconderse, llegará un momento en que se hará visible a todos.

¡Dios odia la hipocresía,y ama a los sinceros!

¡Asuma su fe, y que sus actitudes vengan a mostrar la fe que dice tener en todos los lugares!

Perdone, ame, sea sincera, verdadera,tenga buenos ojos, sea fiel, humilde y la recompensa vendrá, no de los hombres, pero de Dios.

«El amor no sea fingido. Aborrecer el mal y apegaos al bien.»

(Romanos 12:9)

¡Hasta la próxima!

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