¿A quién oír?
- 16
- Jun
- 2015
¿Ya pensó cuántas son las voces que todos los días oímos?
Son muchas… entre ellas las voces de los familiares, de amigos, desconocidos, famosos, de los que dictan la moda y también de nuestro propio “Yo”.
¿Sabe aquella voz que siempre quiere opinar dentro de usted, que parece la voz de la serpiente que tentó a Eva en el jardín del Éden?
Siempre tiene algo negativo para añadir, del tipo… “No lo lograrás, no necesitas hacerlo, para que tanto esfuerzo, no es como te están diciendo…” o sea, siempre intentando amedrentarlo(a). O aquella voz: “¡Es sólo hoy! No va a acontecer nada si sólo es una vez, Dios entiende que la carne es débil!” o “Dios entiende que necesitas mentir, pues no hay otra elección!”
Eso es lo que la voz de nuestro “Yo” hace. Quiere siempre prevalecer sin pensar en las consecuencias. Y claro, el diablo no pierde tiempo, sabiendo lo que desean sus ojos, él se encarga de preparar una trampa
Pero,¿ como oír la voz de Dios, la voz de la fe?
Piense conmigo… Cuando usted conoce muy bien a una persona, sea un familiar, un amigo, reconoce su voz, a veces hasta por los pasos sabe que es ella quien está llegando, o por como llama a la puerta, o la forma de tocar el timbre, ya sabe quién es. Su convivencia con esa persona le permitió ser tan próxima, que reconoce cuando ella está cerca.
¡Así es la voz de Dios! Mientras más interés en oírla, cuanto más placer en estar con Él, en conversar con Él, en hacer de Él su amigo, más claro será para distinguir cuando es su orientación y más fácil será saber lo que Él espera de usted.
Para reconocer la voz de Dios, necesita conocerlo.
Cuando Dios habla no hay lugar a dudas.
Un abrazo y hasta la semana que viene.
Daiana
22 junio, 2015 a 2:2
Es verdad, a veces damos lugar a otras voces, y dejamos de lado la voz de Dios… y son tan tristes las concecuencias…
DANIA M
22 junio, 2015 a 1:2
Es por eso la importancia de La comunicación con Dios, de esta manera no la mente no esta en reposo, en ocio y no dejamos espacio en nuestra mente para escuchar y dejar que nos influeyan los pensamientos de la personas negativas con las que día a día convivimos, siempre hacer oración, leer la biblia, escuchar canciones agradables, oración para
mantener nuestra mente en
cosas de Dios, y de esa manera agradarlo.
Diana
22 junio, 2015 a 1:2
Debemos siempre estar atentas, pues el diablo trata de confundirnos con cualquier pensamiento, es ahi que debemos actuar con nuestra fe, que venceremos, Dios nos habla de victorias!
irvimar
22 junio, 2015 a 0:2
es tan cierto, muchas veces hacemos caso a esas voces que vienen a nuestra cabeza y sabemos que esta errado, mas estamos ten cegadas espiritualmente que no vemos lo que el diablo quiere hacer y ponemos escusas para eso. Y estamos ciegas simplemente porque no escuchamos la voz de Dios y para eso tenemos que buscarlo.
Juana Brusco
21 junio, 2015 a 23:2
Es de suma importancia tener una comunion con Dios, solo asi podremos distinguir cuales son las voces que nos hablan y poder elegir lo correcto. quitar de nuestras vidas, el fracaso y las palabras de derrota.
bianca hidalgo
21 junio, 2015 a 21:2
Es verdad nuestro peor enemigo ES nuestro yo por eso no debemos dejar que nuestra voz interna sea alimentada debemos fortalecernos para así escuchar la voz de Dios mediante nuestra comunión con ÉL.