El arrepentimiento mata

“ ¡Ah! si hubiese hecho caso” esta es la frase que muchas de nosotras un día ya mencionamos, por haber dejado pasar una oportunidad.

¡Yo estoy viendo exactamente eso! Nunca pensé tanto en mis tiempos de escuela como he pensado en estos días.

Hace dos meses que estoy en Guadalupe, un país de lengua francesa, L

Tuve la oportunidad de por lo menos aprender los verbos en el colegio, pero por creer que la profesora era pesada, yo me escapaba justamente en las clases de francés en mi adolescencia, por que no creía que era necesario aprender…… no me imaginaba que hoy me iría a servir tanto como lo necesito ahora.

Hoy todavía estoy aprendiendo, y muchas veces, cuando quiero hablar con alguien, no sé que palabras debo usar, por no saber hablar. Y justo ahí viene el arrepentimiento. Tantas clases desperdiciadas, tanto vocabulario que me hace falta.

Y esto es lo que el mundo quiere poner en la mente, pensamientos negativos para que te limites delante de los desafíos.

¡Piensa! Si fuese tarde, Dios no estaría ahora dándote la oportunidad de aprender, de arrepentirte, de crecer en la vida, de ser diferente, de aprender a depender de tu fe.

Todo esta dentro de nosotros, el poder de la decisión, y nadie tiene el poder de hacer eso por nosotros, a no ser que tú le otorgues ese poder a otros.

Cuida para que tus sentimientos no te hagan rehén y decidan por ti, pues ellos pueden llevarte a la muerte, tanto física como espiritual.

Yo no me limitaré, voy a aprovechar la oportunidad que Dios me ha dado, voy a aprender a hacer de este limón una limonada. ¿Y tú?, ¿vas a continuar pensando en algo que has perdido o vas a dar un vuelco en tu vida?

¡Ahhh!, un aviso: ¡el arrepentimiento mata! Si, mata unido a la falta de actitud y te deja bien enterrada en la acomodación.