Ronquera, ¿cómo prevenirla?

La ronquera es la demostración de que algo pasa con la laringe.

Cuando verificamos algunos de estos síntomas: dificultad al tragar, tos, fiebre, hinchazón en el cuello, dolor en los oídos y acidez en el estomago, ciertamente nuestra laringe será afectada y por eso el timbre vocal puede sufrir alteraciones.

Cuando los síntomas se prolongan durante una semana o más, debemos procurar el otorrinolaringólogo y hacer una evaluación clínica. Mientras tanto, dependiendo del diagnóstico, el paciente es encaminado a un fonoaudiólogo para que empiece el tratamiento con base en una reeducación vocal.

Sobre la reeducación vocal y los innumerables beneficios, para quien debido a su profesión usa y “abusa” de la voz, hablaremos en el artículo de la próxima semana.

Hoy identificaremos los síntomas y causas de la ronquera o disfonía, que pueden llevar a la afonía, es decir, a la ausencia total de la voz.

Pero, ¿qué puede desencadenar esta alteración de la voz y provocar los síntomas referidos?

• Antecedentes familiares;
• Reflujo gástrico;
• Exposición en ambientes fríos;
• Esfuerzo vocal frecuente;
• Mala utilización de la voz.

En estos síntomas, lo que a veces provoca algún espanto es el reflujo gástrico. Muchas personas desconocen que la acidez de estomago puede causar daños en las cuerdas vocales, pero esto es una realidad y los casos se han multiplicado a lo largo de los años.

En diversos acompañamientos con el otorrinolaringólogo también es solicitado el diagnostico del gastroenterólogo, para una evaluación del aparato digestivo.

Los vapores ácidos provocados por el reflujo, afectan a la laringe y hasta la boca, provocando daños particularmente al nivel de la voz. Cuando esto sucede, no se puede iniciar el tratamiento de las cuerdas vocales, antes de eliminar la patología gástrica. Es decir, primero eliminamos el foco del problema y enseguida tratamos los daños causados por el mismo.

Después verificamos los síntomas, causas y especialidades clínicas que debemos buscar para solucionar la cuestión de la ronquera frecuente, ahora, vamos a observar algunos consejos que pueden ayudar y disminuir la frecuencia de los mismos:

• Evita ambientes muy contaminados y con personas fumadoras;
• Hidrata tu aparato vocal, bebiendo bastante agua diariamente (2,5l día);
• Cuando verificas el inicio de los síntomas, reposa la voz durante 24horas;
• Evita bebidas muy calientes o muy frías;
• Evita grandes alteraciones de temperatura;
• No consumas leche ni derivados.

También puedes tomar algunas de estás opciones caseras para el alivio de las molestias, sin que esto anule la necesidad y extrema importancia de la consulta con el especialista;

• Té de regaliz, de gordolobo, o malva;
• Hacer gárgaras con miel;
• Agua templada con miel y propóleos.

No descuides tu voz.

Hasta la próxima semana.