¿Quién eres?

Viviane Freitas

  • 24
  • Feb
  • 2014

¿Quién eres?

  • 24
  • Feb
  • 2014

¡La mayoría de los jóvenes desconoce quien realmente es!

La evidencia de eso es LA DIFICULTAD de seguir el consejo de los padres, de seguir un buen ejemplo y asumir una personalidad positiva.

Lo que ha ocurrido entre los jóvenes, es el hecho de ser fácilmente inducidos, lo que muchas veces los impide tomar sus propias decisiones; hablan y piensan movidos por la emoción e influencia ajena.

Despreciando a la familia o amigos, expresan su indignación de forma inconsecuente, con actitudes agresivas que pasan a tener consigo mismos.

Ej.: Cambiando su estilo de vestir, o su lenguaje, asumiendo un discurso de la “jerga”. Sus tipos de música y libros ya no son los mismos; pasan la mayor parte del tiempo en Internet, todo en el(la) se transforma.

Y todo esto trae un reflejo negativo en la convivencia de los padres, en los estudios, incluso entre otros jóvenes con los que se relaciona.

Hay también aquellos que optan por descubrir sus deseos de “curtir”; saber hasta donde pueden llegar, consumiendo drogas, involucrándose en aventuras sexuales, salas de “chateo”, en fin… Si voy a decir todo lo que ocurre, ¡voy a escribir un libro!

Pero sabemos que la realidad es otra, cuando están a solas, en su habitación. Lejos de ese “mundo”, se ven indefensos, como un bebé, y delante de inúmeras dificultades, piensan en abandonar el curso, los estudios, salir de casa; muchos intentan el suicidio, y otros acaban por cometerlo.

No saben como superar, y en su interior se preguntan: “¿Qué estoy haciendo? Yo no era así, no quería ser así… ¿QUIÉN SOY YO?”

Y sé muy bien de lo que estoy hablando, porque pasé por eso, pero Gracias a Dios lo superé, por eso, hoy, puedo darte esta ayuda.

Y quiero decirte que existe solución para ti; ¡hay una salida! Tienes que luchar, creer en ti mismo, y, si ya no crees, te darás cuenta que solo no puedes, busca ayuda, ¡Déjanos ayudarte!

Escríbeme: falecomruthlima@hotmail.com o busca una líder de FJE, y pídela que te traiga hacia mi o mi esposo, o a una consejera. Tienes inúmeras personas que quieren, y pueden ayudarte.

Danos esta oportunidad, ¡y dátela a ti mismo! Búscanos y permítenos ayudarte.

¡Un abrazo!

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