- 9
- Oct
- 2014
Obrera : Obrera en peligro
- 9
- Oct
- 2014
Hay señales de peligro que revelan nuestra condición espiritual.
Son alertas, que identifican hasta que punto nuestro interior está afectado, reflejándose, ineludiblemente, en el servicio a la Obra de Dios. Preste mucha atención.
Dentro de la Iglesia:
– Va para que no la digan que no se viste con el uniforme
– Va para cumplir un deber
– Va para agradar al pastor o a terceros
– Es la última en llegar y la primera en salir
– No tiene placer en atender a las personas
– No se interesa en ayudar a los que llegan por la primera vez a la iglesia
En relación a la reunión: Predicación y oración.
– No consigue prestar atención.
– Siempre se distrae
– La palabra nunca es para ella. Los demás son quienes necesitan oírla
– No habla con Dios y ni siente deseo de ello.
– Cuando ora es una repetición de palabras.
En relación a las ofrendas, diezmo y sacrificio
– Piensa que por se obrera ya no necesita más ofrendar y diezmar
– El sacrificio no es necesario, pues en su comprensión, el hecho de vestir el uniforme ya es un sacrificio
En relación al Espíritu Santo
– Busca sin necesidad. Sin sed de ello·
– Busca para tener una posición en la iglesia o ser reconocido como una persona de Dios·
– Busca en la emoción
El artículo de las obreras de hoy es un alerta, pues si detectó algún síntoma de estos en su vida, entonces sepa que está en peligro, no de dejar de ser obrera, pues hay muchos que a los ojos de Dios ya no lo son, pero sí en peligro de perder el bien más precioso: ¡Su Salvación!
No dude en pedir ayuda. Busque a su pastor, responsable o esposa de pastor, si descubre que sola ya no consigue encontrar el «camino de vuelta». ¡Para eso estamos aquí!
Si desea, deje su comentario o pedido de ayuda.
Apocalipsis 3.15-17: «Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente! ‘Así, puesto que eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. ‘Porque dices: “Soy rico, me he enriquecido y de nada tengo necesidad”; y no sabes que eres un miserable y digno de lástima, y pobre, ciego y desnudo…»
Marina Schiaffino
20 octubre, 2014 a 18:2
Muy fuerte!! Es una gran ayuda para auto analizarse… Y corregir lo que esta mal. No por llevar un uniforme, sino por nuestra Salvación que es lo que más importa!!!
DIANA VELA MONTERO
19 octubre, 2014 a 1:2
Al leer este articulo me di cuenta , que muchas veces llegamos a tener actitudes que se van haciendo habituales y hacen que nuestra fe se apague , es el mismo Dios hablando para todas las obreras que debemos tener mucho cuidado para no caer , debemos dejar de ser orgullosas ya aceptar que necesitamos mas de Dios , porque Dios sin nosotros sigue siendo Dios pero nosotros sin Dios no somos nada
Verónica Muñoz
19 octubre, 2014 a 0:2
De nada sirve hacer la obra de Dios si en nuestro interior estamos mal con El, si tomamos actitudes solo para demostrar a los demás que somos capaces de realizar su obra.
Ser obrera requiere una responsabilidad enorme con el pueblo, con la iglesia, pero de nada nos servirá ganar todo el mundo y perder nuestra alma, lo que mas debemos proteger y vigilar es nuestra salvación.
MARIA BELEN ANGELO
17 octubre, 2014 a 19:2
MUY FUERTE ESTE ARTICULO,OS LLEVA A REFLEXIONAR ,COMO ESTA NUESTRA VIDA ESPIRITUL,AVESES CON EL PASAR DE LOS AÑOS NOS ACOMODAMOS Y SE HACEMOS TODO EN FORMA RUTINARIA Y PENSAMOS QUE TODO ESTA BIEN.
BELEN ANGELO
17 octubre, 2014 a 19:2
MUY FUERTE ,ESTE ARTICULO ,PORQUE NOS LLEVA A PARAR Y PENSAR ,COMO ESTA NUESTRA VIDA ESPIRITUAL,MUCHAS VESES CON EL PASAR DE LOS AÑOS QUEDAMOS ACOMODADAS Y PASA SER TODO RUTINARIO.
ROSA SILVA
17 octubre, 2014 a 3:2
En este articulo es el propio Dios hablando con nosotras,para despertad,vigilar y cuidar nuestra comunión con Dios. Y hacer la obra con amor como si fuera la primera vez porque Dios necesita de cuerpos para hacer su obra y salvar almas.