LA VERDAD – Episodio 80: La verdad sale a la luz

LA VERDAD – Episodio 80 : La verdad sale a la luz

La verdad no nos da el derecho de poner escusas, porque la conocemos. Pero ¿cuándo la persona no recibe la verdad?

¡Jerusalén, Jerusalén, la que mata a los profetas y apedrea a los que son enviados a ella! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta sus pollitos debajo de sus alas, y no quisiste!” (Mateo 23:37).

Jerusalén simboliza la Iglesia del Señor Jesús, que tiene la oportunidad de oír la verdad por medio de los profetas. Pero Jerusalén mató a los profetas, no recibió la verdad. Las personas se ofendieron con la verdad.

La verdad nos cobra para que tomemos una decisión. Y Dios no nos obliga a aceptarla. Él usa a los siervos, pero no todos aceptan a los siervos de Dios.

He aquí, vuestra casa se os deja desierta.” (Mateo 23:38). ¿Cuántas personas están en la Iglesia hace muchos años? ¿Aparentemente, están usando la fe, pero no aceptan la verdad?

¡Serpientes! ¡Camada de víboras! ¿Cómo escaparéis del juicio del infierno?” (Mateo 23:33). El Señor Jesús habla de esta manera con este tipo de persona que tiene la oportunidad de ver y oír la verdad, pero se camufla en la religiosidad, en los rituales, en las cosas que hace.

En aquella época, estaban los religiosos que no aceptaban y no se permitían oír la verdad del Señor Jesús, porque ellos se autoafirmaban del bien. Pero Dios, que ve todo, sabía lo que ellos hacían a escondidas.

Aún existe esta persecución a los siervos de Dios. ¿Cuántas personas están en la iglesia intentando difamar al siervo de Dios?

Para que recaiga sobre ustedes la culpa de toda la sangre justa derramada sobre la tierra, desde la sangre del justo Abel hasta la sangre de Zacarías, hijo de Berequías, a quien ustedes asesinaron entre el templo y el altar. En verdad os digo que todo esto vendrá sobre esta generación.” (Mateo 23:35,36).

La Palabra de Dios se va a cumplir. Él está dando oportunidad. Un día, esa sangre será cobrada de aquellos que no hicieron caso de la verdad de Dios.

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