LA CODICIA – Episodio 14: La codicia es idolatría

LA CODICIA – Episodio 14 : La codicia es idolatría

¿Ya se obcecó por algo?

¿Tuvo una pasión que hacia que esa persona no saliese de su cabeza?

¿Sabe, cuando sólo piensa en arreglarse para ella, para él…?

¿Cuándo, a toda costa quiere llamar la atención? No sólo un día, sino día tras día…

Pues si, eso es obsesión, es decir, un apego excesivo por una persona, por una cosa, por una idea, por un pensamiento… Así como la preocupación exagerada por el hijo, el marido, el novio. Esto no le hace bien a nadie, porque hace que la persona esté completamente sin norte, desequilibrada.

Es no es otra cosa sino idolatría. Es un impulso, una necesidad intensa para hacer algo sin lógica. Esto también pasa con el dinero.

La Biblia dice lo siguiente:

“Porque las obras de la carne son manifiestas…” Gálatas 5:19

Es decir, son las consecuencias de una persona que vive en la carne, que se está dejando guiar por sus impulsos, por sus manías por sus argumentos. Esos impulsos tendrán consecuencias, y esas consecuencias se manifestarán a través del adulterio, fornicación, impureza, lascivia. Y, hoy, vamos a hablar de la idolatría.

Tal vez usted piense que idolatría es simplemente adorar a otros dioses, que no sean Dios, el Dios verdadero. Si, es verdad. Pero eso puede pasar de varias maneras.

Por ejemplo, cuando pone a alguna persona, un problema en primer lugar, que incluso le desequilibra, le deja son norte. ¿Usted es capaz de hacer cualquier tontería por causa de aquella persona? Eso es porque la está idolatrando, adorando a esa persona, cosa o pensamiento.

Parece que la idolatría es una cosa que no hacemos.

Usted que conoce, que oye hablar de Dios, que conoce a Dios, sabe que rendir culto a otros dioses no le conviene. Pero, esto puede pasar de manera muy sutil, a veces, un pensamiento insistente, una cabezonería.

Me acuerdo que hace unos años, tenía una idea, un pensamiento que tenía que ser de aquella manera, me molestaba, estaba irritada, ansiosa, queriendo imponer mi voluntad. Es decir, esa idea, ese pensamiento al que se curva, al que se inclina y no deja que nadie le quite eso de la cabeza, eso también se considera idolatría.

Y la idolatría quita la paz de la persona, porque venera aquel pensamiento, adora, acepta, le gusta lo que sucede con esa idolatría. Y termina rechazando la Palabra de Dios.

Y muchas personas están siendo rechazadas por Dios porque son necias, quieren insistir en su manera de ser.

¡Tenga cuidado! Porque tal vez no tenga paz, esté triste, angustiada porque vive obstinado con un  pensamiento que no le deja, no le permite aceptar, recibir la Palabra de Dios.

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