El “León» y el miedo

Viviane Freitas

  • 10
  • Ago
  • 2016

El “León» y el miedo

  • 10
  • Ago
  • 2016

Observa bien la actitud de los miembros de esta tribu: avanzaron sin miedo para enfrentar el león, sabiendo que de eso dependería, no apenas a preservación de su herencia cultural, sino por encima de todo la defensa de su territorio y de su único medio de sustento.

A pesar de haber sido preparados durante 7 años, sería allí, en aquel momento, que probarían si realmente todas las enseñanzas y horas de entrenamientos intensivo tendrían su efecto.

Este ejemplo me hizo pensar seriamente en aquello que Dios nos enseña en Su Palabra:

“Sed de espíritu sobrio, estad alerta. Vuestro adversario, el diablo, anda al acecho como león rugiente, buscando a quien devorar.” (IPe.5:8)

Nuestro “león” tiene un nombre y se llama diablo; aquel que nos tienta, nos rodea cada instante e intenta “tragarnos” a través de los problemas, de las circunstancias adversas, de las tentaciones, etc., ¡y la única forma de que consigamos librarnos de sus armadillas es yendo a por él sin miedo! Confiando en aquello que aprendimos de la Palabra de Dios, ¡creyendo que en todo somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó! (Rm. 8:37)

¿Has observado cómo el león se intimidó y huyó, cuando aquellos hombres se acercaron?

Así es el diablo: Él teme cuando nosotros no tenemos miedo… ¡La única alternativa de él es huir!

“Por tanto, someteos a Dios. Resistid, pues, al diablo y huirá de vosotros.” (Tg.4:7)

Amiga, pero para esto es necesario que tu actitud pruebe, de hecho, tu creencia. No significa, obviamente, que aquellos hombres no temieron acercarse a aquellos leones, porque como animales salvajes, serían imprevisibles. Pero ellos no se permitieron dominar por el miedo, en virtud del objetivo que los movía. De esta forma, recordaron y practicaron todo lo que les había sido enseñado durante el tiempo de su preparación.

Así debe ser con nosotros, en relación a todo lo que hemos aprendido de Dios y de Su Palabra. Si te atemorizas delante del problema, de las situaciones difíciles, de las probaciones y de las tentaciones, ¡¿qué tipo de fe demuestras?! Apenas pruebas que todo el tiempo de enseñanzas, direcciones, mensajes, sea poco o mucho no te ha beneficiado, ¡por la falta de la práctica de una fe sin temor!

¿Te acuerdas de Daniel, delante de cuya fe Dios mandó cerrar la boca de los leones? (Dn.6:22)

¿Y esto por qué?

Porque si él no temía el decreto del rey, que tenía poder para mantener en vida o condenar a muerte, ¡cuánto más la boca de los leones!

Esta certeza, el hecho de no tener miedo, nos permite avanzar, desarrollar en la fe y ser honrados por el propio Dios, con el fin de glorificar Su nombre.

¿Quién le dijo a Daniel que no se curvase delante de un hombre? ¿Quién lo incitó a permanecer fiel?

Daniel, ¡él mismo hizo sus elecciones!

Escogió permanecer fiel en sus momentos con Dios, preservando por encima de todo, su buena conciencia. ¡Esa fue su prioridad!

Esta actitud llevó a Dios a librarlo de la muerte con certeza, ¡pero no sólo esto! Su elección permitió que el nombre de Dios se conociese en todo el reinado de Nabucodonosor, el cual, por su propio decreto, ¡ordenó que todos deberían reconocer el poder salvador del Dios de Daniel! (Dn.6:26)

Otro ejemplo: José fue llevado a prisión, durante años, porque escogió no ceder a la tentación. (Gn.39:10-12) ¡Más tarde vino a ser el gran gobernador de Egipto!

Dios se quedó “asistiendo” las elecciones de cada uno, dándoles la recompensa debida, realmente guardamos y practicamos Su Palabra.

Y aquello que yo escoja pautará mi vida, de ahí en adelante. Por eso es que no todos son aprobados delante de las situaciones, las luchas, los problemas, las pruebas, las tentaciones…

Todo aquello que Daniel y José aprendieron de Dios, a través de las enseñanzas de sus ancestros, fue puesto a prueba. Fue esto que dictó lo que Dios hizo dentro de ellos a través de cada uno.

Dios observa todo lo que somos y hacemos, y no influye en nuestras elecciones, una vez que ya nos enseñó, orientó y nos dio Su Palabra; cabe a cada uno de nosotros oír y practicar. Atentar para todo aquello que hemos aprendido y ponerlo por obra.

Dejar un mensaje

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

2 comentários

  1. Uno es quien decide si dejarse undir por el problema o confiar en Dios y ir con todo para superar la situación vivida y despues de haber tomado la decisión, se vera mas adelante la consecuencia de la decisión tomada.!!!

    Ver más
  2. El “León” y el Miedo!
    Muchas veces el cambio no cusede en nuestras vidas por el miedo. O por la duda. Y tome una decision una vez que podria causarme la vida pero como habia indignacion, tuve que usar una fe sin miedo.
    http://www.vivianefreitas.com/es

    Ver más