5º Día – ¿Qué hace al corazón idolatrar?

Hola a todos los internautas, es un placer estar aquí con vosotras, hoy ya es el 5º día del Ayuno, y si estás dispuesta realmente a hacer todo nuevo en este Ayuno, si estás dispuesta a oír la verdad que es como una espada de dos filos que penetra donde nadie puede penetrar, es la Palabra de Dios, la Palabra de Dios abre nuestro ojos, nuestro entendimiento; cuando la misma es aceptada, cuando se está buscando.

Si no estás buscando desarrollar tu relación con Dios, entonces tus palabras no van a coincidir con tus actitudes.

Bueno, hoy vamos a abordar el tema: ¿Qué hace al corazón idolatrar? Acompaña conmigo en el libro de Colosenses 3:5-10

“Por tanto, considerad los miembros de vuestro cuerpo terrenal como muertos a la fornicación, la impureza, las pasiones, los malos deseos y la avaricia, que es idolatría.

Pues la ira de Dios vendrá sobre los hijos de desobediencia por causa de estas cosas, en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas.

Pero ahora desechad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, maledicencia, lenguaje soez de vuestra boca.

No mintáis los unos a los otros, puesto que habéis desechado al viejo hombre con sus malos hábitos,y os habéis vestido del nuevo hombre, el cual se va renovando hacia un verdadero conocimiento, conforme a la imagen de aquel que lo creó;…”

Bueno, es un poquito largo los versículos que hemos leído, pero dice muchas cosas, y me gustaría llamar tu atención ahora hacia palabra de Dios, dice así:

“Por tanto, considerad los miembros de vuestro cuerpo terrenal como muertos…” ¡Ah!, ¿no es Dios? ¡No! ¡Eres tú quien hace morir esa vieja naturaleza! “¿Cómo voy a hacerla morir?” Dejando de nutrirla dentro de ti, dejando de apreciarla, dejando de gustarte, de aceptarla, cuando yo acepto una de estás características que hablan aquí, de “la fornicación”; que como sabes la fornicación es la relación sexual ilícita, existen relaciones sexuales ilícitas dentro del matrimonio, tú que estas casada, hay ciertas cosas que están prohibidas que las hagas, como el sexo anal, el sexo oral no conviene, no es saludable; ¿y por qué? ¿Por qué eso no es agradable a Dios? Porque no es de acuerdo con lo que Dios creó, Dios creó la manera correcta de tener la relación sexual; el adulterio, es decir traicionar a tu compañero, la fornicación también es el sexo antes del matrimonio, el homosexualismo, el hombre que le gusta otro hombre; lesbianismo, mujer que le gusta otra mujer; relación sexuales con animales; relaciones sexuales con parientes cercanos; todo esto es fornicación, ¿entiendes?; cuando dice que quién hace morir esta naturaleza… ¡eres tú!, es la propia persona, es el propio individuo que practica tales cosas.

La impureza, la impureza es esa falta de pureza, es aquella forma de ser sensual, te pones ropa para llamar la atención de aquella persona que te gusta, o llamar la atención de una forma para llamar la atención, para que se vea tu cuerpo, eso no es de Dios, tú que usas tanga, eso no es apropiado; con ningún tipo de ropa, ni blanca, ni negra, ni azul , ni ningún color, ¿por qué? porque tus nalgas van a llamar la atención, van a estar moviéndose, y eso va a hacer a otras personas, a otros hombres a mirarte, es decir, vas a incentivar a alguien mirarte las nalgas, no conviene eso, no es bonito eso, es muy feo…

Las pasiones, que es la sensualidad, la manera sensual y a veces no es solo con la ropa, es la manera de ser, de comportarse, de andar, de moverse, llamando la atención.

Los malos deseos, esto es en la forma de pensar, de sentir y actuar, cuando deseas algo malo, es algo destructivo, que es solo para tu beneficio.

Y la avaricia, la avaricia sabes que es esa persona que está apegada al dinero, que no tiene generosidad, que es tacaña, a veces estabas pecando porque vives una vida tan limitada en la vida económica que cuando tienes que compartir y vives con otra persona, no quieres compartir, no ayudas, quieres que todos te miren y tengan pena de ti, que te ayuden, pero tú también tienes que hacer tu parte, todo lo que abordamos aquí, de la fornicación, de la impureza, de las pasiones, malos deseos y avaricia, ¡es idolatría!, ¿por qué es idolatría? Porque acabas curvándote a algo que no es Dios, o tienes un ímpetu a ese amor excesivo de tus deseos, de tus necesidades, eso es una idolatría.

Continuando aquí Él dice:

“Pues la ira de Dios vendrá sobre los hijos de desobediencia por causa de estas cosas,…”

¿Quiénes son los hijos de desobediencia? Es justamente esas personas que están en la Iglesia y saben la verdad, pero quieren hacer las cosas a su manera, quieren comportarse a su manera, y esos son los hijos de la desobediencia y ahí viene la ira de Dios, y muchas personas piensan así “¡Dios mío! ¿quiere decir que Dios tiene ira?” ¡Tiene ira, si! Hay gente que cree que Dios no tiene que tener ira, solo el ser humano tiene que airarse, ¡solo tú te puedes airar! Pero cuando haces lo que no es agradable a Dios, ciertamente tú haces que nazca la ira, tanto de Dios, como de las personas que están a tu alrededor…

“…en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas.”

Cuando no conocías la verdad, vivías en ellas, como dice aquí, anduvisteis en ellas..

“…pero ahora desechad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, maledicencia, lenguaje soez de vuestra boca.”

En otras palabras, que cuando alguien es hijo de desobediencia, que practica tales cosas que hemos mencionado en al principio, como la fornicación, la impureza, las pasiones, los malos deseos, la avaricia, esas tales personas también se aíran, pero no por algo justo, sino que se aíran porque quieren las cosas a su manera, tienen ira, enojo, malicia, quieren las cosas a su manera, no quieren pagar el precio, por ejemplo; es de la iglesia, y porque es de la iglesia no voy a pagar el precio por lo que me está vendiendo, diciendo: “Mira, yo soy miembro y tú también eres miembro, entonces dámelo, tienes que donarlo…”

Amiga internauta, tú tienes que saber lo siguiente, cada persona tiene sus responsabilidades, y no tienes que aprovecharte porque otro cristiano trabaje, y tú te vas a aprovechar porque él trabaje y tiene condiciones para facilitarte las cosas, ¡no es así!, por eso, estás cositas que aparentemente parecen boberías, pero todo esto sale del corazón, a veces las personas quieren el Espíritu Santo, pero están apegadas al dinero, apegadas a cosas insignificantes, cosas como por ejemplo tus deseos, tus manías, tus pensamientos fijos.

“…pero ahora desechad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, maledicencia, lenguaje soez de vuestra boca. No mintáis los unos a los otros…”

Hay muchas personas que acaban mintiendo porque quieren agradar a los otros, o quieren crear un buen ambiente, yo sé porque quieres agradar o quieres hacer un buen ambiente, ¿sabes por qué? porque no odias el pecado, entonces aceptas camuflar, aceptas engañar, aceptas mostrar una cosa que no eres.

“No mintáis los unos a los otros, puesto que habéis desechado al viejo hombre con sus malos hábitos, y os habéis vestido del nuevo hombre, el cual se va renovando hacia un verdadero conocimiento, conforme a la imagen de aquel que lo creó;…”

Bueno, amiga internauta, ¿ves? el corazón puedes idolatrar deseos, puedes idolatrar manías, defensas, porque cuando tienes ira, enojo, tienes malicia, maledicencia… por ejemplo, has sido decepcionado, entonces haces que las personas tengan el mismo comportamiento que tu tienes con la persona que te decepcionó, es decir, tu ya no confías en un hombre, no confías en amistades, en una amiga,… ¿por qué? porque cargas el pasado dentro de ti, tienes que despojarte de eso, y tienes que asumir esto delante de Dios, cuando vayas a la reunión, tienes que exponer eso para Dios, por eso, es importante que estés bien cómoda, en el sentido de que puedas ser quien tienes que ser delante de Dios, cuando estés en la iglesia y necesites hablar con Dios, apártate de quien sea que esté cerca, para puedas quien tienes que ser, si tienes que arrodillarte, si tienes que poner la cara en la pared, pero que hables y reveles quién has sido, ayúdate amiga internauta, porque eres tú quien tiene que hacer morir esa vieja naturaleza, eres tú quien tiene que despojarse, eres tú quien tiene que odiar tus acciones, eres tú quien no tiene que seguir nutriendo pensamientos nocivos, maliciosos, eres tú quien tiene que mirar con buenos ojos, ¡no es Dios! ¡no es el Espíritu Santo quien va a hacer eso! ¡no!, ¡eres tú! ¡Y cuando tú quieras! Cuando yo quiero, hablo con Dios, ¿no es verdad? cuando yo quiero, yo como; cuando yo quiero, yo duermo; cuando yo quiero trabajo; de la misma manera cuando quiero hacer lo que es correcto, ¡yo hago lo que es correcto!, ¿y por qué no? ¿por qué dices que ahora es el diablo? ¿por qué siempre pones un problema en medio? Que es el pasado, que es tengo muchos problemas ahora,… ¡cómo es posible amiga internauta! ¡Problemas todos estamos pasando! Pero esto es una optima oportunidad para tener experiencias con Dios, pero solo tendremos experiencias con Dios cuando nos despojamos, cuando nos abrimos con Dios, cuando hablamos de lo que realmente está dentro de nosotros.

¿Has entendido? ¡sé sabia! Practica lo que has oído aquí, escucha el audio, quizá dices así: “¡Hay muchas enseñanzas aquí!, ¡ya estamos en el 5º día y hay muchas cosas que he aprendido, y muchas cosas que tengo que corregir…!”

Entonces amiga internauta, escucha los audios, escribe en una hoja de papel, habla con Dios, expón todo lo que hay, porque así, cuanto más hables de ti para Dios, más te vas a vaciar, cuanto más retengas, más perjudicada vas a ser y aún más vas a quedarte con dudas.

¿Por qué? porque no has hecho lo que tienes que hacer, ¡haz lo que tienes que hacer!

¿Está bien amiga internauta? No desistas de ti, puedes estar en el fondo del pozo, llena de errores, llena de pecados, horribles, pero si eres sincera y los odias todos ellos, entonces haz morir esa naturaleza.

Haz tu parte, bautízate en las aguas, libérate, ves a la reunión de liberación, haz tu parte… puede ser los Domingos por la tarde, tienes los viernes todo el día, hay otros días, y dices: “¿puedo buscar mi liberación?” ¡claro que puedes!¡ves a la iglesia!¡Ves y haz tu parte! porque estos 21 días, son los 21 días para que tomes la decisión de resolver tus problemas amiga internauta, ¡resuelve todos ellos!

Arranca todo lo que te está haciendo dudar, ser débil, insegura, miedosa,… arráncalo, ¡y tira ya todo eso hacia fuera! Porque esas cosas no te están ayudando y te hacen ser miserable.

¿Está bien amiga internauta?

Valora tu alma y Dios va a hacer lo imposible, ¡va a hacerte nacer de Dios!, pero para eso tienes que reconocer y asumir tu condición.

Un fuerte abrazo y deja aquí tu comentario.

Hasta mañana