26º Día – Manifestación de la Fe – Anda por encima de los problemas

Para ser Uno con Dios, debemos manifestar la Fe; andar por encima de los problemas.

“Al atardecer, sus discípulos descendieron al mar, y subiendo en una barca, se dirigían al otro lado del mar, hacia Capernaúm. Ya había oscurecido, y Jesús todavía no había venido a ellos; y el mar estaba agitado porque soplaba un fuerte viento. Cuando habían remado unos veinticinco o treinta estadios, vieron a Jesús caminando sobre el mar y acercándose a la barca; y se asustaron. Pero El les dijo: Soy yo; no temáis. Entonces ellos querían recibirle en la barca, e inmediatamente la barca llegó a la tierra adonde iban.” (Juan 6:16-21)

El problema de la oscuridad, y de que los vientos soplen fuerte en el mar, ya atemorizaba a los discípulos, que habían ido adelante, solos. Cuando el Señor Jesús se le apareció andando sobre el mar, ¡se quedaron perplejos!

Aunque puedan existir momentos que en virtud de nuestra imperfección en que los problemas no ahoguen estos servirán como una oportunidad de manifestar nuestra fe y nuestra dependencia de Dios.

¡No pasamos por problemas en vano! Son justamente para desarrollar nuestra fe y que no sigamos siendo personas inmaduras.

Cuanto más problemas enfrentamos, más maduramos.

Por ejemplo: Hay muchas personas que son “jovencitas” en la fe, a quienes les pasa todo muy rápido: Ya han sido liberadas, nacieron de nuevo, fueron bautizadas con el Espíritu Santo, y hablan de Jesús, sintiéndose “todopoderosas”. Como fue en mi caso, ¡por qué el Espíritu Santo es poder!

Pero, pasan los años, y vamos enfrentando diferentes y diversos problemas. En ciertas situaciones, parecía que Dios estaba lejos, que yo estaba en el “barco” sola, que Jesús estaba ocupado con otras personas y Se había olvidado de mi…

Pero no era el caso. ¡Jesús nunca Se olvida de nosotros!

La sensación, cuando enfrentamos problemas, ¡es la de que estamos solos! En realidad, esto es para salvar nuestra “vida”; para guardarnos y mantener nuestra salvación.

Los problemas sirven como aviso, para que percibamos que nuestra creencia en Dios no puede estar “muerta”. Tenemos que estar activos y vigilando en cada momento.

Hay momentos en que te sientes debilitada, pero, cuando eres bautizada con el Espíritu Santo, ¡vences!

No es algo que te ocurre durante toda la vida.

Si por casualidad dices: “He enfrentado un problema interior, durante mucho tiempo, y no consigo cambiar. Y yo soy bautizada con el Espíritu Santo, tienes poder para vencer los problemas del día a día. Por eso está escrito, que “aquel que es nacido de Dios, vence al mundo…”. Es exactamente porque el nacido de Dios, vence tanto lo que está en su interior, como fuera.

¡Está manifestación de fe, sirve precisamente para hacernos madurar y avivarnos! Sino tuviésemos problemas, nos volveríamos religiosos, fanáticos, mecánicos. ¡Hablaríamos de Dios, iríamos a la Iglesia, pero “empujados”! Porque nada nuevo ocurriría. ¡Viviríamos del pasado!

Por eso, hemos hablado, que debes renovar tu fe, renovándote cada día, ¡todos los días!

Por ejemplo, el obispo Macedo, ya tiene 69 años, pero está más “joven” que nunca, ¡por causa de su espíritu! Comparándolo con personas que llevan mucho tiempo de obra, que se vuelven mecánicas, sin anda nuevo, ¡se ve claramente la diferencia! Precisamente porque él sigue manifestando su fe, aprendiendo, a lo largo de los años ¡volviéndose joven!

¡El espíritu se fortalece y nos volvemos invencibles!

¡El tiempo que llevas en la Iglesia, no es para que te hagas un “profeta viejo”! Es justamente para madurar y ser invencible en contra de los problemas. Al manifestar la fe, te haces “joven”, día a día.

Tú, amiga internauta, que estás enfrentando una guerra en este Ayuno de Jesús, en esta Cuarentena, ¡porque los demonios que estaban en tu vida no quieren perderte! Enfrentas una “guerra” dentro de casa, en la calle, donde vas.. ¿y por qué? ¡Porque estás descubriendo tus derechos!

Para esto estamos haciendo la Cuarentena, y no para transmitirte información. Es para descubrir tus derechos, ¡poner al diablo debajo de tus pies y usar la fe como debe ser!

Si has acompañado el Blog, incluso artículos anteriores, yo siempre digo que ¡quien persigue, es el fuerte! Si el problema te ha perseguido, es porque el problema es más fuerte. Y tú tienes que cambiar este cuadro… “Andar sobre el mar”, esto es, ¡perseguir el problema y ultra pasarlo!

Aunque esté “oscuro”, pareciendo que no tienes dirección, y el “mar” este agitándose por causa de “los vientos”, ¡usa tu fe! Piensa en la fe inteligente que te hace tener un objetivo: ¡Ser Uno con Dios! Y no permitas que nada te distraiga.

Quiero saber de ti: Escribe aquí lo que has enfrentado, ¡pero no permitas que te “ahogue” más! Sea la inseguridad, el miedo, o lo que persista en tu interior…

Se osada y verdadera; pon tu nombre. No tengas vergüenza de asumir tu creencia en Dios. Porque, cuando haces las cosas malas, representas al diablo, pero cuando reconoces tu error, muestra también, al diablo y al mundo, que asumes tu condición, ¡y que la enfrentas!

Un fuerte abrazo para vosotras y mañana volvemos.