21º Día: ¿El qué nunca puedes olvidar?

Viviane Freitas

  • 10
  • Oct
  • 2015

21º Día : ¿El qué nunca puedes olvidar?

  • 10
  • Oct
  • 2015

Hola a todos los internautas, llegamos al 21º Día, hoy, sábado.

Y el tema de hoy: “Lo que nunca puedes olvidar”.

EL libro de Deuteronomio 8:11 va a responderte:

“Cuídate de no olvidar al SEÑOR tu Dios dejando de guardar sus mandamientos, sus ordenanzas y sus estatutos que yo te ordeno hoy;

no sea que cuando hayas comido y te hayas saciado, y hayas construido buenas casas y habitado en ellas,

y cuando tus vacas y tus ovejas se multipliquen, y tu plata y oro se multipliquen, y todo lo que tengas se multiplique,

entonces tu corazón se enorgullezca, y te olvides del SEÑOR tu Dios que te sacó de la tierra de Egipto de la casa de servidumbre…”

Cuando estamos siendo respondidas, teniendo éxito, sea en la vida económica, financiera, familiar, profesional, como en todas las áreas, incluyendo el área espiritual, ¿qué acontece?

Tal vez hasta hayas acompañado los audios en estos 21 Días, y ciertamente, muchas personas, ya no sean las mismas…. Se concertaron, se descubrieron, resolvieron varias cosas y están sintiéndose “otra persona”; sin embargo, a veces, se olvidan de lo que aconteció.

El Ayuno fue hecho durante estos 21 Días, y después del mismo, “te relajas”, diciendo: “Ahora voy a hacer las cosas que hacía antes, pero claro, con precaución.” Sin embargo, no guardas lo que has vivido durante estos Días. ¡Y eso no puede pasar! Sabes lo engañoso que es el corazón y su tendencia para el mal. Por eso está escrito: “Cuídate de no olvidar al SEÑOR tu Dios…”.

Aunque todo te vaya bien y las cosas estén fluyendo, ¡no te puedes olvidar! Porque descubriste algo sobre ti, estás feliz, cambiaste, y las personas reconocen esto; no es ahora que “has edificado buenas casas y estás viviendo en ellas”, que estás comiendo y hartándote, que ahora tienes plata, oro y tienes abundancia en tu vida con Dios, y te olvidas y regresas… ¿Sabes? No vas a “volver” descaradamente, sino que será “despacito, despacito…”. Diciendo: “Ah, esto no es malo…”.
Sin embargo, poco a poco van entrando nuevamente los malos hábitos.
Por ejemplo, cuando estás en una dieta y cortas el azúcar y el trigo, quitándolas de tu alimentación; tú tienes ganas de comer, pero pusiste una traba y dejaste de comerlos durante un tiempo, pero como ya adelgazaste, ¿qué sucede?: que poco a poco vas comiendo azúcar, primero una vez a la semana, y después vas aumentando a dos, a tres veces… hasta que vuelva a ser nuevamente natural en tu vida. Lo que pasa es que las cosas vuelven despacito, porque alcanzaste un objetivo, pero nunca puedes, por más que te hayas recuperado, siempre tienes que estar “atenta” porque tu corazón quiere estar “a su voluntad”; no quiere sacrificar. ¡Esta es la verdad!
Entonces no te olvides, guarda todo lo que te fue enseñado. Si es necesario oye los audios nuevamente, participa y proponte de aquí en adelante separar un momento para leer la Biblia, hablar con Dios y no gastar tanto tiempo viendo o diciendo cosas inapropiadas Ayer hablábamos de cómo hablar con Dios… ¡algo fundamental! Andando, caminando, sentado a la mesa, ¡tienes que hablar de las cosas de Dios y vivir Dios!
No te olvides de aquello que Dios hizo dentro de ti; no te olvides de aquello que el corazón es capaz.

¡Guárdate! Porque quien va a guardar, no es el ángel, no es el pastor, sino tú misma, cuando tienes temor en relación a las cosas de Dios:

Amigo y amiga oyente, internauta. Guárdate, porque esta, tu alma, necesita ser salva, ¡hasta el fin!

Vas a vivir momentos difíciles, momentos de alegría, pero nunca te olvides de dónde saliste: ¡De Egipto! De quién eras y cómo estabas.

Te espero esta semana, participando aquí en el Blog.

Mañana, Domingo, va a ser el gran Día, donde los obispos estarán en Israel intercediendo para que seas bautizada con el Espíritu Santo para que aquellos que están débiles, vena la grandeza de Dios en sus vidas.

Mañana no dejes de participar, da tu vida a Dios y pon toda tu fuerza en tu oración, en tu entrega, ¡expón todo! No te limites porque haya personas a tu lado, sino estate bien cómoda para hacer tu parte.

Otra cosa, me gustaría que el día 11 de Octubre hicieses tu comentario, o al participar aquí en el Blog del 21º Día, acerca de lo que sucedió contigo, cuál fue el audio que más te llamó la atención.

Un fuerte abrazo para ti, la semana que viene estaremos de regreso hablando sobre “La Amiga”, y también continuando los audios de los viernes, sobre el Amor, ¡dónde vas a descubrir muchas cosas!

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1 comentário

  1. Sra. Viviane yo sé que es principalmente para las mujeres que usted escribe, sin embargo quiero relatar mi experiencia en estas últimas semanas. Tengo 28 años y casi 2 años en la Iglesia y tuve desde mi adolescencia problemas de adicción a la pornografía. Estando ya en la Iglesia no podía vencerla ni con ayunos, ni con votos ni con Hogera Santa ni con nada… Esto me frustaba totalmente. En el ayuno de Daniel llegué a su blog y empecé a leer sobre el corazón. ¿Y sabe que descubrí? ¡Que muy escondido en mi corazón me agradaba lo que hacía y no quería soltar y no me daba cuenta de eso! Por eso no mudaba nada en mí. Porque en el fondo de mi corazón yo estaba apegado a mi lujuria y a mis placeres y sólo en la superficie estaba Dios. En el día 13 hice lo que Ud pidió que hiciéramos; hablé con Dios de toda la inmundicia que había en mi corazón, de todo lo que yo sentía y hacía, me vacié hasta de lo más vergonzoso, ¡y fue como usted dijo! ¡Tuve noción por un instante de la infinita misericordia y del infinito amor de Él hacia mí! Fue muy fuerte. De ahí algo cambió en mí; supe quién era mi rival realmente. Después del ayuno y de seguir al pie de la letra todo lo que usted habló (A veces sin agrado, confieso) le digo finalmente que Dios me bautizó con Su Espíritu y terminó el problema que me había atacado desde mi adolescencia. Cambió mi corazón. Muchas gracias.

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