- 14
- Mar
- 2012
Trauma Insistente
- 14
- Mar
- 2012
¿Cómo quitar algo que te causó tantas marcas y dolor?
¿Cómo puede salir algo que sientes, si quieres y tienes “razones” para estar de esta forma?
Queridas y amadas lectoras. Yo no pensaba que tenía un trauma, pues durante toda mi vida siempre hubo alguien en quien me refugié para olvidar. La familia tuvo un papel fundamental para mí. Ella me daba todo lo que necesitaba. Cariño, atención, etc… siempre aprecié esto en ellos.
Pero el tiempo fue pasando y fui creciendo. El trauma estaba allí, junto a mí, pero que estaba escondido. Todas las veces que me encontraba en nuevos desafíos, en nuevas relaciones o cuando reveía personas que ya conocía… pero que no me recibían de la forma que yo esperaba, él surgía sin esperar.
Intentaba y me esforzaba para encajarme. Pero por dentro nada… encajaba con los asuntos, los juegos e incluso la forma de ser de aquellas personas.
Pero lo que no entendía, era el hecho de ser “prójimos”. Pero ¿por qué tenía dificultad en relacionarme? ¿Cuál era el motivo?
Yo lo intentaba, pero mi asunto no encajaba. Y con eso…iba generando aquella sensación escondida, que yo no sabía que aún existía. La inseguridad. No soy quien soy con ellas. ¿Por qué me retraigo?
Después de salir de aquel grupo…allí estaba yo, llorando.
¡Qué es eso! ¿Te sentías así?
Si. Infelizmente no sólo me sentía, como también gemía y me angustiaba.
Siempre que estaba en grupos, si no encajase, en seguida volvía todo aquello de nuevo.
Infelizmente pasaron años para que eso se fuese desvendando. Nunca imaginaria que un problema externo tuviese que ver con mis ojos y con mi interior.
Yo viví situaciones que muchos no estaban viviendo y que ni imaginaban que yo estaba pasando. Estaban a mi lado… sin embargo, parecía que hacían “la vista gorda” a mi estado.
Pero… ¡No era la vista gorda! Ellos no tenían la capacidad de entender, porque no lo pasaron.
Las consecuencias son drásticas cuando guardas un trauma – que viene de los sentimientos.
Era el trauma.
Dios me reveló todo delante de mí, como si fuese una película en directo. Pude entender desde el día que nací, quien era, e incluso porque tenía aquellas reacciones que no hacían parte de lo que quería para mí.
Espera el próximo post.
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Adela
23 febrero, 2013 a 10:2
Tengo muchos años de iglesia y nunca me di cuenta hasta hoy que lei este mensaje suyo del trauma a mi me sucede eso yo entro en un grupo y duro poco no por los demas si no es que yo soy una persona que parezco muy simpatica pero en realidad cuanto mas sola este mejor cuando termina las reuniones me escabullo rapido como que no quiero que nadies me vea por eso me interesa mucho tener completa su enseñanza gracias
Liliana Alcanis
13 abril, 2012 a 12:2
A mi me paso exactamente lo mismo, hay que enfrentarnos y no evadir mas, matar el pasado.
Ágatha Cristina- España
26 marzo, 2012 a 19:2
Buenas tardes
He podido observar que estos últimos textos tratan una vez más de traumas y sentimientos. Eso nos pone en alerta que la gran mayoría de los problemas están originados en un sentimiento perjudicial que por una u otra razón no solo dejamos entrar como también echar raíces.
Tales raíces un día dan su fruto, y es ahí, cuando nos damos cuenta que hemos vivido una vida marcada y pautada por tal trauma o decepción.
En ciertas ocasiones, los frutos o consecuencias son tan devastadoras, que la muerte es la única salida que encuentra esa persona. ¡¡ Cuantos no fueron los suicidios que ya se cometieron por tales causas!!
Pero como lei en uno de los comentarios, nuevas oportunidades llegan y reconociendo y reaccionando debidamente ante tal descubrimiento, una nueva historia puede ser escrita en la vida de cada uno. Basta cortar de raíz, tal horrible trauma, sentimiento, decepción…