Revolución Externa

La revolución externa comienza en el interior, porque solamente podemos ejecutar algo externo si estamos definidos internamente.

Lo que sucedió es que al mismo tiempo que estaba gritando y gimiendo, también hubo actitudes sobrenaturales en mí. ¡Empecé a definirme y a cortar cualquier mal por la raíz!

Comencé a dar y recibir dirección, como un tiro en el blanco.

Empecé también a generar una revolución en los demás, hasta el punto de que todos los que estaban como yo, esperando pacíficamente, provocó en ellos gritos y búsqueda constante de una respuesta.

Las cosas no permanecieron en el mismo estado. Todo empezó a tener forma.

Todos los problemas pendientes tuvieron una salida y una respuesta.

Es tan impresionante como todo empezó a existir, y no sólo generó vida en el propio trabajo. Nadie quedó indiferente.

Los compañeros de Guerra, se unieron y comenzaron a actuar como un solo hombre. Éramos más que una familia.

Todos estos beneficios, tuvieron un proceso muy duro. Alguien tuvo que manifestarse como un líder, para así traer conquistas.

El equipo se animó.

Ahora, conseguimos proceder, poniendo todo lo que estaba atrasado en orden. Es sólo cuestión de tiempo, ¡el éxito es prometedor!

“Y la tierra estaba sin orden y vacía, y las tinieblas cubrían la superficie del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la superficie de las aguas. Entonces dijo Dios: Sea la luz. Y hubo luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas.” Gn 1:2-4”

Yo pregunto, ¿no es esto una revolución; dar forma a lo que está sin forma? ¿quitar la oscuridad? ¿Separar la luz de las tinieblas, el bien del mal, lo que sirve de lo que perjudica?

¡¡¡¡Esto es lo que ocurre cuando el Espíritu del Creador actúa en aquellos que se indignan en contra de todo lo que está sin forma y vacío!!!!