¿QUIÉN ES DIOS? ¿QUIÉN ES USTED? – Episodio 17 : ¿Por qué la persona no consigue entrar en el Reino de Dios?
- 17
- Oct
- 2023
¿Por qué la persona no consigue nacer de Dios? ¿nacer del agua y del Espíritu? ¿por qué no consigue entrar en el Reino de Dios? ¿qué está pasando para que las cosas de Dios no existan en su vida?
Jesús dijo a Nicodemo:
“Respondió Jesús y le dijo: En verdad, en verdad te digo que el que no nace de nuevo no puede ver el reino de Dios…. No te asombres de que te haya dicho: «Os es necesario nacer de nuevo.
El viento sopla donde quiere, y oyes su sonido, pero no sabes de dónde viene ni adónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.” Juan 3:3-8
La persona que es carne no entiende lo que estamos hablando aquí ahora. Porque en realidad, la persona que es nacida del Espíritu es dirigida por Dios, el Propio Dios la dirige. Por eso, ella no puede hacer planes para dónde va, no de dónde viene, ella sabe que su vida está a disposición de Dios.
“Respondió Nicodemo y le dijo: ¿Cómo puede ser esto?
Jesús respondió y le dijo: Tú eres maestro de Israel, ¿y no entiendes estas cosas?” Juan 3:9,10
Jesús quería que Nicodemo reconociese su estado, pero Nicodemo no entendía lo que el Señor Jesús le estaba diciendo.
Y ahí Jesús nuevamente dice:
“En verdad, en verdad te digo que hablamos lo que sabemos y damos testimonio de lo que hemos visto, pero vosotros no recibís nuestro testimonio.” Juan 3:11
Aquí está la respuesta del por qué Nicodemo no podía entender, del por qué no sucedía el gran milagro de nacer de nuevo, nacer de Dios: porque él no aceptaba el testimonio del Señor Jesús. De que Jesús vino de parte de Dios para servir y estaba a disposición de Dios.
El Señor Jesús no vino con un plan de cómo sería aquí en la Tierra. Él se puso a disposición de Dios, y toda persona que es nacida de Dios es dirigida por el Propio Dios.
Entonces Jesús dijo así:
“Si os he hablado de las cosas terrenales, y no creéis, ¿cómo creeréis si os hablo de las celestiales?” Juan 3:12
Este es el problema de la persona que es nacida de la carne. Incluso hablando de las cosas terrestres, ella no acepta el testimonio, es decir, la vida de la persona. Ella tiene su propio reino, su manera de ver. Por es no consigue ver el Reino de Dios, porque ella ve otro reino.
Usted que ha vivido una vida de amargura, vive dependiendo de una respuesta para tener una poco de alegría, una realización temporal, esto es porque no conoce a Dios.
Cuando conoce a Dios, se volverá independiente de las cosas de afuera. Va a depender de Dios. Su reino ya no va a ser vivir para lo que usted ve, sino para aquello que cree. Esa es la gran diferencia de aquellos que nacieron en el Espíritu.
¿Usted nació del Espíritu? ¿Tiene valor de rever su vida y encarar la realidad?
Si la persona no consigue ver el Reino de Dios, ¿cómo podría entrar, y desear entrar en el Reino de Dios? ¿no es así?
El problema de todo esto es lo que le gusta a la persona, es lo que ella alimenta. Le gustan las cosas que el mundo le ofrece, los placeres temporales. Por ejemplo, hay personas a las que les gusta tener una reputación en una iglesia, ser un diácono, un pastor, una esposa de pastor, y no quiere nacer de Dios, no quiere la verdad, ella solo quiere su postura, su reputación delante de las personas.
No está buscando, no quiere el Reino de Dios. Mira a las cosas aquí en la tierra, como las personas van a verla, esto es lo que pasa cuando la persona no ve el Reino de Dios.
¿Usted encaja en esta situación? A usted que le gustan los aplausos, le gustan las amistades, la moda, la parte física, que mira a su prosperidad, a su futuro, futuro aquí en la tierra, no el futuro con Dios, no el futuro de su alma. No busca a Dios, al Creador de los cielos y de la tierra, porque se contenta con cosas ilusorias, temporales, sepa que ese es el motivo de que usted esté viviendo de esa forma.
Por eso tiene tristezas, frustraciones, porque busca cosas pasajeras y las mismas no permanecen, no le realizan como persona, no le sustentan a la hora del dolor, no le hacen fuerte. Por lo contrario, muchas veces incluso le hace resistente al precio que tiene que pagar. Y ahí está la razón por la cual ha escogido la mentira, la ilusión, el reino de este mundo.
Busque la Verdad, por más que duela, que señale su realidad. Acepte, porque la Verdad es la única que le libera del engaño. ¿Es eso lo que quiere? ¿quiere la verdad o continuar siendo engañado?