LA VERDAD – Episodio 88 : La verdad sorprende

¿Sabe aquella sensación de creer que puede sobrepasar las luchas sin ningún daño considerable? Mucha gente cree así, mucha gente que aún no es bautizada con el Espíritu Santo, aunque haga ciertas cosas… como la obra de Dios, evangelizando, atendiendo o incluso fue beneficiado, curado, alcanzó esto o aquello, pero de hecho no nació de Dios. Apenas tuvo experiencias con las conquistas en el Reino de este mundo.

Y Jesús sabiendo todo esto, sabiendo que los discípulos aún no habían sido bautizados con el Espíritu Santo, y por eso no podrían aguantar la lucha, Él les dijo:

“ Todos vosotros os escandalizaréis de mí esta noche; porque está escrito: Heriré al pastor, y las ovejas del rebaño serán dispersadas.” Mateo 26:31

Se imagina a usted siguiendo a Jesús hace tres años, siendo contado, curando, aprendiendo la palabra de Él… obviamente que, en estos tres años, de tanto ver el testimonio del Señor Jesús sabe lo que es correcto.

¿Sabe cuando tiene la conciencia de lo que es correcto, pero aún no se conoce? ¡Pues si! Exactamente esto estaba pasando con los discípulos.

Porque cuando la persona aún no es bautizada con el Espíritu Santo, no puede vivir la Palabra de Dios de forma natural en su vida. Tiene que hacer mucho esfuerzo, por eso Jesús dijo que ellos se iban a escandalizar con el Señor Jesús, porque Él sería herido, tomado de ellos, y ellos se dispersarían.

Pero Jesús dijo:

“… después de que yo haya resucitado, iré delante de vosotros a Galilea…” Mateo 26:32

Jesús, de antemano, estaba hablando sobre lo que iría a suceder. Pero ¿sabe cuando alguien está hablando, y su mente está, pero no cree?

Probablemente, era así cómo los discípulos estaban y pensaban: “Jesús es el Salvador, Jesús cura, Jesús libera a las personas de los demonios, Jesús resucita a las personas…, ningún mal va a suceder con Él. Jesús debe estar hablando de otra cosa…”

En realidad, quien aún no es bautizado con el Espíritu Santo, no entiende exactamente lo que Jesús está hablando.

Y es tan lindo ver la forma que el Señor Jesús trabaja.

Él dijo que iba a resucitar, y encontrarse con ellos en Galilea, pero Pedro respondiendo les dijo:

“Aunque todos se escandalicen por causa de ti, yo nunca me escandalizaré.” Mateo 26:33

Pues si, la persona que no es bautizada con el Espíritu Santo está convencida de que consigue sobrepasar ciertas luchas. Que nunca va a tropezar en ninguna lucha que sea, porque ya conoce la verdad, sabe cómo actuar, sin embargo, quién no es bautizado con el Espíritu Santo no tiene fuerzas para actuar. Por eso es un tropiezo, es un escándalo esta situación.

Bueno, ahora me gustaría que pensase sobre su relación con Dios. ¿Es realmente bautizado con el Espíritu Santo? Espere, espere… deje de responder de forma rápida.

Verifique las señales que ha dado delante de las dificultades, ¿qué hace? ¿cómo reacciona con Dios delante de las dificultades?

Cuando la persona está convencida, tiene la certeza de aquello, y parece que aquella certeza es una fe, es una fuerza, es un poder. Sin embargo, cuando vienen las pruebas, ¿dónde está la fuerza que pensaba que tenía?

¡Y ahí entran las pruebas, las señales de que esa persona no tiene el Espíritu Santo! Cuando retrocede, cuando tiene miedo, cuando es desacreditada.

Jesús le dijo a Pedro:

“Jesús le dijo: De cierto te digo que esta noche, antes que el gallo cante, me negarás tres veces.” Mateo 26:34

Se imagina, en aquella misma noche, Pedro pensando que sobrepasaría aquella lucha, pero él mismo niega a Jesús tres veces. Si… Pedro no sabía sobre sí mismo.

La persona que no es bautizada con el Espíritu Santo no percibe sobre si mismo. Va a tener que ver señales para probar que no es bautizada con el Espíritu Santo, para así ponerse delante de Dios como necesitada.

Y mire lo que sucedió:

“ Pedro le dijo: Aunque tenga que morir contigo, jamás te negaré. Todos los discípulos dijeron también lo mismo.” Mateo 26:35

Si… un engaño. Engaño para aquellos que no tienen el Espíritu Santo, porque no van a conseguir sobrepasar las luchas.

¿Y usted? ¿por qué aún no es bautizado con el Espíritu Santo?

¿Es porque no presta atención a las señales que ha vivido, que revelan que no es nacido de Dios? Se convence de las obras, de la palabra que oyó, de las renuncias que hizo.

En el caso de Pedro, él seguía a Jesús, pero él y los discípulos; todos huyeron en aquella hora crucial del Señor Jesús.

Ahí hay una reflexión para que piense sobre si mismo.

La única manera de la persona recibir el Espíritu Santo es entender la condición en que ella se encuentra.