El mal que entra por los ojos
- 22
- Jun
- 2015
«Entonces Saúl se enfureció, pues este dicho le desagradó, y dijo: Han atribuido a David diez miles, pero a mí me han atribuido miles. ¿Y qué más le falta sino el reino? De aquel día en adelante Saúl miró a David con recelo. Y aconteció al día siguiente que un espíritu malo de parte de Dios se apoderó de Saúl, y éste deliraba en medio de la casa, mientras David tocaba el arpa con su mano como de costumbre[. Saúl tenía la lanza en la mano…
(1 Samuel 18.8-10)
Son palabras que entran en el corazón, actitudes que disgustan, situaciones mal resueltas, que están a medias, pecados no confesados, etc. Cualquiera de estos ejemplos, de entre tantos otros, pueden ser fatales para que el corazón se haga el centro de las decisiones. Y ya sabemos que cuando el corazón decide… es una puerta abierta para el diablo provocar toda especie de estragos. Y con graves y eternas consecuencias.
Esta semana, por medio de una situación, vi claramente la forma en la que el diablo actúa, usando circunstancias habitualmente sin un fondo verídico, para provocar una espiral de sentimientos completamente opuestos a la fe racional. Aquello que comenzó con un sentimiento de “desconfort” inicial por una palabra apenas, se convirtió en una batalla “férrea” contra el odio, la rabia y el dolor. Y aquí el camino ya se hizo prácticamente irreversible. ¿Por qué? Porque la ceguera espiritual dominó, prevaleciendo sobre todos los valores, inclusive el de la fe.
Saul se quedó ciego por la envidia, por la rabia, por el odio, entrando así en un camino acelerado para su propia destrucción. Fue sólo una cuestión de tiempo.
¡Un llamamiento a su atención!
No se permita convivir con ningún tipo de sentimiento negativo, por más insignificante que le pueda parecer. No deje que sus hijos o familiares alimenten “guerras” entre sí, a causa de envidias, problemas antiguos… Yo ya vi eso acontecer: Madres que odiaron a un ser querido, sea marido, abuelo, suegra, y que no consiguieron superar sus propias amarguras, la transmitieron a sus hijos, que continuaron con ese odio… ¡No haga eso! Por peor que haya sido la situación, el peor mal que hace es a sí misma y a su familia, alimentando esos sentimientos.
Resuelva lo que tiene que resolver, supere odios y dolores antiguos, o recientes, no importa, pues el único lugar para donde eso la llevará es a la muerte espiritual.
¿No quiere quedarse “ciega”? Entonces salvaguardese a usted y a su familia de caer en la tentación de los “malos ojos”, pues estos tienen la capacidad de “cegar” hasta al “rey” más poderoso.
Si este es su caso, exponga hoy mismo esa situación a Dios y busque cuánto antes a su responsable espiritual, su pastor, una esposa de pastor, alguien que tenga autoridad de ayudar y encaminarle de la forma correcta.
Ninguno de nosotros sabemos cuanto tiempo tenemos, por eso el tiempo es hoy y ahora.
Si ya ha atravesado una situación de este género, comparta con nosotros sus experiencias. Con certeza servirá para ayudar a alguien.
Dios les bendiga. ¡En la fe!
Tania Albornoz
25 junio, 2015 a 4:2
Hola sra en mi caso , yo pase por una situacion de mirar con malos ojos a una persona y la verdad no es nada bueno, yo veia a esa persona y todo lo que ella hacia para lo hacia mal o siempre pensaba que lo hacia con el objetivo de ella sobresalir , para vencer eso 1 reconoci antes Dios que yo estaba mal , y hice un proposito con Dios , comenca a orar por ella , y ahi el diablo estaba ahi queriendo hacermen ver que no iba a lograrlo , mientras mas el intentaba hacerme mirar mal yo mas orar por esta persona y me acerque a ella y le pedi disculpas , pues quien se perudicaba era yo misma y gracias a Dios el me ayudo a vencer y resistir a los dardos del diablo y eso malos ojos yo venci .
Stefany
25 junio, 2015 a 3:2
Ya he tenido algunas experiencias con respecto a este tema de los malos ojos, y es algo muy complicado de controlar. En mi caso Para superarlo tuve que vencer mi orgullo y hablar con aquella persona ya que a veces no es suficiente con solo confesarle a Dios, sino que debemos superarnos y sacar de raíz todo sentimiento que nos perjudique y eso es algo que solo nosotras mismas podemos hacer.
Stefany Hernández
25 junio, 2015 a 3:2
Ya he tenido algunas experiencias con respecto a este tema de los malos ojos, y es algo muy complicado de controlar. Para superarlo tuve que vencer mi orgullo y hablar con aquella persona ya que a veces no es suficiente con solo confesarle a Dios, sino que se debe sacar de raíz todo sentimiento q
Edye Diaz
25 junio, 2015 a 3:2
Realmente sino estamos vigilantes, seríamos presa también de este mal pensamiento, es un mal que la gente no ve en el momento porque justifican su actitud de envidia o de odio por algo sin sentido, por eso creo que cada vez que pase algo por lo mínimo que sea en nuestra mente de querer tener alguno de estos sentimientos de odio, de resentimiento debemos cortar eso en el mismo instante, Dios es bueno y si queremos ser semejantes a nuestro Padre también debemos pensar en lo que es bueno, orando y vigilando siempre de no caer en estos detalles que aunque parezcan sin sentido son los que como dice este post nos llevan a la muerte espiritual.
Candela Cros
25 junio, 2015 a 2:2
Es verdad.. los sentimientos son del diablo, y de que te sirve tener odio, rencor, bronca a otra persona ?, ya sea quien sea, de nada ! porque la que se esta perjudicando es la persona misma, pero la persona que quiera cambiar delante de Dios verdaderamente, ella toma una decisión, una actitud de fe, ella es salva, mas el que no quiera reconocer es por que no quiere nada con Dios..
Yo lo pase y no es nada lindo, porque yo me sentía mal, no la otra persona, pero yo persevere y hoy yo estoy libre por que realmente yo me arrepentí y di punto final a esa situación.. Lindo post Sra !
Candela Cros
25 junio, 2015 a 2:2
Es verdad.. los sentimientos son del diablo, y de que te sirve tener odio, rencor, bronca a otra persona ?, ya sea quien sea, de nada ! porque la que se esta perjudicando es la persona misma, pero la persona que quiera cambiar delante de Dios verdaderamente, ella toma una decisión, una actitud de fe, ella es salva, mas el que no quiera reconocer es por que no quiere nada con Dios..
Yo lo pase y no nada lindo, porque yo me sentía mal, no la otra persona, pero yo persevere y hoy yo estoy libre por que realmente yo me arrepentí y di punto final a esa situación.. Lindo post Sra !